lunes, 2 de septiembre de 2013

Capitulo 37



—Quizá ellos crean que lo del duelo no era más que una travesura, pero yo no, Weddy. A mí no me engañas. Has salido de aquí con la intención de matarlo.
Weddington estudió el rostro de su esposa, aquella barbilla levantada, signo de que no estaba dispuesta a tolerar tonterías. La quería tanto, que se conformaba con que su hijo conociera a una mujer a la que quisiera tan sólo la mitad.
—Sí, tenía intención de matarlo —admitió de mala gana, no muy orgulloso de su propósito inicial.
—¿Y por qué no lo has hecho?
—Porque no es el hombre que te ofendió.
—Entonces, ¿no fue Peter?
—No.
—¿Fue John, como sospechabas?
—Sí.
—¿Y dónde estaba Peter mientras sucedía todo eso?
—Es complicado, Eleanor, y no quiero que nos sorprendan hablando de ello. Basta con que sepas que Peter ha estado... indispuesto todos estos años. Por desgracia, aún no le ha contado nada a su esposa.
—¿Por qué?
—Es complicado.
—Sólo sabes decir eso...
—Porque es la verdad. —Echó un vistazo a la puerta, decidió que Peter aún podía tardar un rato en calmar a su esposa y empezó a contarle a Eleanor lo que le había sucedido a su amigo. Ella lo escuchó sin pronunciar una sola palabra, hasta que hubo terminado.
—¡Qué horror para él! ¡Y para ella! No se ha casado con quien pensaba casarse.
—No, se ha casado con un hombre mejor.
Su esposa apretó los labios con fuerza.
—Sabes que es cierto, princesa.
—Aun así, debe contarle la verdad.
—Lo hará.
—¿Cuándo?
—Cuando llegue el momento.
—No te parece mal que se haya casado con ella —espetó Eleanor con sorna.
—Iba a casarse con el duque de Killingsworth, y es con quien se ha casado.
—Pero es un hombre distinto al que creía.
—Su matrimonio no es problema nuestro, Eleanor.
—Ella me cae bien, Weddy.
—Entonces deberías alegrarte de que se haya casado con Peter y no con John.
—Hombres. Siempre haciendo piña.
—Porque vosotras hacéis lo mismo.
—No estamos en guerra.
—Déjalo estar, Eleanor. Hay cuestiones más importantes en juego.
—¿Como qué?
—Sus títulos y sus propiedades —dijo él con el cejo fruncido.
—Típico de un hombre confundir así sus prioridades. Si las considera más importantes que ella, entonces no la merece.
—Eleanor, en estos momentos necesita nuestro apoyo y nuestra amistad más que nada. No nuestra censura.
Ella arrugó su tentadora boca, como haciendo pucheros.
—Muy bien. Lo dejaré estar por ahora, pero si no se lo dice pronto, tendré que encargarme de recordárselo.
—Se lo advertiré.
—A propósito de advertencias, me preocupa esta tormenta, Weddy. Empieza a ser bastante violenta. Había pensado proponerles que pasen la noche aquí para que no tengan que viajar con tanto barro, pero no sabía si te parecería bien.
—Me parece perfecto que les ofrezcas nuestra hospitalidad para esta noche, pero asegúrate de instalarlos en la otra ala, tengo planes para ti esta noche.
—¿Tienes prevista alguna travesura?
—No lo dudes.
Su sonrisa se marchitó y frunció el cejo.
—¿Crees que Peter conseguirá solucionar su problema?
—Yo haré lo que pueda por ayudarle, pero me temo que es él quien debe arreglar las cosas. Aunque tú también puedes echarle una mano.
—Dime cómo. Haré lo que sea.
—Si se presenta la ocasión, resalta sus virtudes, que Lali se enamore del hombre con el que se ha casado.
—¿No me has dicho que su matrimonio no es asunto nuestro?
—Y no lo es.
—Pues lo que me has pedido que haga contradice esa opinión.
—Cuando se descubra su engaño, todo será más fácil para Peter si ella lo quiere más que a su hermano.
—Se me hace raro hablar de «engaño» cuando él es el duque legítimo.
—Por desgracia, no se considera el marido legítimo.
—Es el marido perfecto.
—Sin duda. ¿Harás entonces lo que te he pedido?
—Sólo si me prometes ser muy malo cuando nos vayamos a la cama —le respondió ella con una sonrisa pícara.
—Seré tan malo como quieras —le aseguró él inclinándose hacia ella.
—Te quiero, Weddy.

—No más que yo a ti.

1 comentario:

  1. awww lindos <3 ya van dos que creen en Peter vamos por mas Pitt jajaja
    Eppa se portaran mal jajjaj
    Besitos
    Marines

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